lunes, 18 de octubre de 2010

Que la fuerza te acompañe!

La prioridad número uno de todo ser humano debería ser luchar contra la propia estupidez.

Lo más probable es que al final perdamos, pero eso no es excusa para no intentarlo.


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6 comentarios:

  1. Carolina18 de octubre de 2010, 15:30

    Hola Dani! que tal?!

    Por mi parte ya te lo digo: es una batalla perdida =/ xD

    Besos!

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  2. Natalia19 de octubre de 2010, 14:59

    Quienes nacimos dotados de una inteligencia casi artificial, no tenemos que luchar contra nada. Pues eso.

    ¡Pero es broma!

    Ahora, dado que no interioricé tu entrada, me limitaré a preguntarte algo jodidamente personal. Dani, ¿eres casado?
    -Pido que no se tome como una insinuación (con los tiempos en los que vivimos, si no lo aclaro... una nunca sabe). La verdad es que simplemente me picó el bichito de la curiosidad.

    Un beso.

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  3. Horacio19 de octubre de 2010, 18:29

    es excusa, porque la estupidez permanece, pero cada derrota duele

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  4. Caro Pé20 de octubre de 2010, 21:02

    Cuánta sabiduría, hombre reflexivo carajo! resultó ser usté ;)

    Estoy enojada U-u xq no vino más a mi bloc
    me voy de aquí derrapando......................................................................................................................................................................

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  5. Daniel21 de octubre de 2010, 14:23

    Carolina: a mi me queda la ilusión de ser un idiota tranquilo, y entre tanto idiota con ganas de joder eso me alcanza para sentirme mejor.

    Nata: estoy en pareja desde hace cien años (o así parece), lástima que lo tuyo no sea una insinuación. No, era broma, a ver si termino preso!

    Horacio: y, si, duelen.

    Caro Pé: otra mujer enojada conmigo! (hay algo que no termino de entender: depende de cómo entre a tu perfil, veo sólo un blog (fishboy) o dos blogs (Pastiche y Desde la llanura). No importa, asumo la responsabilidad y ya mismo modifico mi conducta reprochable.

    Un beso a todos, o mejor dos.

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  6. Anónimo7 de abril de 2011, 9:22

    Atrapado en la computadora, pude romper la inercia después de finalizado el lapso temporal que abarcaba el desarrollo de la clase teórica de geología a la que me había propuesto asistir. Si me apuraba y la tardanza del pasar del colectivo en mi contra no jugaba podría ingresar a la siguiente clase, la de zoología, aunque sea por la mitad de la misma. Al llegar a la puerta del aula y asomarse vislumbre una multitud de alumnos prolijamente ordenada atenta a la palabra de un anciano profesor, o al menos esa fue la impresión que mi subjetivismo elaboró. La idea era llegar antes o coincidentemente del recreo para así entrar sin interrumpir la clase, pero al parecer este había concluido. Mi autoestima no me daba para entrar al aula en esas condiciones. Recorrí la facultad buscando algún lugar en cual poder sentarme y leer con el fin de adelantar algo para “mi tercera clase” del día, la de antropología. Encontré un cuarto sucio y lleno de grafitis jipones y me senté e intenté leer. Me sentía cansado, pesado y concentrarme no podía. Como tenía algo más de hora y media libre me retiré al bosque cercano a la facultad (se le dice bosque pero esta muy lejos de ser tal cosa). Ahí me tiré panza arriba en un sector de pastos altos. A pesar de eso no me fue tan incomodo y en unos minutos me quede dormido.
    Bueno, la cuestión es que escucho una melodía en la que en una parte se canta "tan pobre y tan idiota... tan pobre y tan idiota..." y despierto. La canción se interrumpe y se pierde. El sol se retira, el frio impera, mi cuerpo entumecido y mi mente enajena pensando en... ¿tan pobre y tan idiota? ¿eh? ¿como?
    Regreso a la facultad, no encuentro el aula en la que se dicta antropología, probablemente habían cambiado los horarios del practico, o yo había anotado mal, o no se... La cuestión es que la clase no la tenia o no la encontré y algo frustrado vuelvo a la pensión caminando.
    Y hoy, que tal vez como acarreo de la desmoralización de ayer no asistí a las clases que me correspondían esta mañana, se me da por intentar estudiar sobre mineralogía y cristología por internet para compensar algunas de mis ausencias, pero...
    Primero se me viene una frase y esa frase es "luchar contra la propia estupidez", así que la busco en el google (con las comillas incluidas). En la lista este sitio aparece último y séptimo, los otros anteriores no despiertan interés suficiente por diferentes motivos. El texto que se vislumbra desde el buscador me resulta identificativo. Ingreso y aparece este blog. Leo esta nota y acto seguido muchas otras notas. Intuyo que la forma de poder despegarme de la inercia de leer una y otra y otra nota perjudicándome así por seguir acrecentando el atraso en mis obligaciones pendientes es escribiendo en esta misma nota alguna estupidez. Entonces escribo esto, y comparto las premisas que ya están escritas, y me propongo una vez más intentarlo: el luchar; contra la propia estupidez; hasta el fin; más allá del resultado.

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