martes, 17 de noviembre de 2020

De políticos y fertilizante

Se llamaba Cayo Aurelio Valerio Diocleciano Augusto. Con ese nombre, verdulero no podía ser, pero casi...

Fue emperador romano durante veinte años, hasta el 305 después de Cristo. Persiguió a los cristianos de forma implacable, estabilizó un imperio que ya estaba indefectiblemente en la pendiente, aseguró las fronteras; hasta creó el primer plan de precios máximos para tratar de frenar la inflación (es en serio!) y por supuesto falló.

En 305, cansado, abdicó al trono (fue el primero que no se fue con los pies para adelante), se retiró a una finca en su tierra natal (actual Croacia) para cultivar coles. Y luego de regentear el mundo durante dos décadas, allí murió.

Inevitable pensar en la escena de la muerte de don Corleone en su jardín.

Cuentan que, debido al caos que comenzó a resurgir luego de su retiro, su sucesor lo llamó pidiendo ayuda. El habría contestado algo así como "sólo alguien que no vió la lozanía con que crecen las coles en mi huerto puede pedirme que vuelva".

Quién sabe, tal vez habría que fomentar las clases de jardinería entre nuestros políticos...

3 comentarios:

  1. Vamos, demoled nuestras vidas! Somos lo que hicieron de nosotros, sniff, snif
    Dioclesiano tenia un hijo "endemoniado", igual que ahora, y no hay angeles que vengan a salvarnos; despertame cuando el 2020 termine.

    Abrazo y feliz noche

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  2. la política si bien antes me apasionaba Trupm me quitó las ganas de todo
    un saludo

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  3. No fue verdulero pero si un buen agricultor.
    Un poco de historia, no viene mal, en estos años son muy pocos los politicos que pudieron mantener la estabilidad de un pais, reducir la pobreza, crear fuentes de trabajo y el bienestar de los ciudadanos en general. Son muy pocos los que pediria que vuelvan!!
    Un abrazo!!

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