domingo, 28 de noviembre de 2010

Mamá

Fecha: año 2005
Autor: mi vieja
Técnica: oleo
Medidas: qué se yo, no tengo una regla a mano

sábado, 27 de noviembre de 2010

viernes, 26 de noviembre de 2010

Lo dije yo

Nada es como uno quisiera, porque uno no es como uno quisiera.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Reflexiones de un hombre realizado

Al fin, un día, uno la tiene clara.

Ya entendió qué es lo que vale la pena.

Es un preciso juez del buen gusto.

Está de vuelta de un montón de cosas.

Al fin se siente respetado.

Incluso ya pasó la etapa de querer dar consejos.

Es así. Uno, al final, la tiene clara.

Tantos años de ser uno mismo al final han dado sus frutos: uno puede mirar a los demás con ese aire de tranquila superioridad, sabiendo que uno no es perfecto, pero que el hecho de saberlo lo acerca aún más a la perfección.

No voy en tren, voy en avión...
Y mientras miro las nuevas olas, yo ya soy parte del mar...

Entonces una muela no te deja dormir, o te agarra la madre de todas las cagaderas, o sorpresivamente te rajan del laburo, o increíblemente tu mujer te mete las guampas (parece que no, pero para fines prácticos, todo esto es casi, casi lo mismo).

Y entonces entendes que siempre fuiste (y sobre todo siempre serás) un tipo más.

martes, 23 de noviembre de 2010

Mi trasero y la gravedad

¿Viste cuando tenes algo que hacer y lo dejas para más adelante? Sabes que lo tenes que hacer, sabes que lo vas a hacer, pero por algún motivo lo demoras. No me refiero necesariamente a un hecho desagradable.

Como cuando sabes que tenes que archivar la ropa de invierno, como cuando la canilla del lavabo pierde un poquito y sabes que en breve va a perder más, como cuando sabes que tenes que comprarte un par de zapatos (odio comprarme ropa) y sin embargo lo pospones...

A veces sabes qué es lo que tenes que hacer, sabes que finalmente lo vas a hacer, pero por algún motivo estiras los tiempos. Incluso podes ir sintiendo cómo esa cosa, de a poco, va haciéndose más impostergable.

A veces podes seguir tus tiempos y cuando llega el día, simplemente lo haces. Otras veces, algún hecho acorta los plazos y te ves forzado a la acción.

Cuando varias de estas situaciones se superponen, hasta te puede generar una sensación de agobio totalmente innecesaria. ¿Por qué seré tan culo pesado para algunas cosas?

domingo, 21 de noviembre de 2010

viernes, 19 de noviembre de 2010

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Extemporánea

El término "matrimonio igualitario" debiera ser una redundancia.

Y sin embargo es una utopía.

Dueño vende

- Posibilidades de progreso? Si, claro! Mireme a mi: entré como un simple empleado y vea hasta donde llegué! (eso sí, hasta que yo no me jubile -y falta mucho- ni lo sueñes)

De una forma u otra, todos ofrecemos algo y todos buscamos algo. La mayoría de nosotros lo hace disimuladamente. Es como si entrásemos a un negocio y, mientras simulamos hablar por el celular, miramos la mercadería de reojo, fingiendo desinterés.

- Yo soy una mina alegre, conmigo la vas a pasar bomba! (eso sí, en mi vida tuve un orgasmo)

A veces veo al mundo como un gran salón de venta de autos usados. Todos mostrando joyitas "nunca taxi", único dueño, papeles al día, ofrecidos por una viejita que lo usaba sólo para ir a la iglesia los domingos.

- Es una ganga! Tiene sol de mañana y de tarde y las expensas están regaladas. (eso sí, cada vez que llueve te mojas hasta las rodillas)

Todos sabemos lo que nos quita puntos, y sabemos también que es mucho más barato maquillar que arreglar.

- Soy cariñoso y romántico (eso sí, a mi novia anterior la cagué con todas las amigas)

Como ladrón que roba a ladrón, solemos entrar en estas negociaciones pensando en sacar la mejor parte. Y como lo intangible es imposible de evaluar, solemos concentrarnos en lo tangible, sea piel o papel (moneda)

Como en toda venta de autos usados, el kilometraje recorrido suele ser percibido como una desventaja, al igual que cualquier abolladura, ya sea del cuerpo o del alma.

Ahora bien. Hay otras concesionarias. No son las que más venden y cuesta encontrarlas. Tal vez en este momento no tengan el modelo que usted busca; pero si lo encuentra, entonces sabrá exactamente qué compró.

Haga valer su dinero.

martes, 16 de noviembre de 2010

lunes, 15 de noviembre de 2010

Análisis I

El mundo me parece un lugar frío y despiadado.

Escribo esto y no puedo escapar a la idea de que lo que yo llamo "el mundo" es tan sólo "mi mundo"; porque al igual que en la metáfora de los ciegos que palpan al elefante, no existe "el mundo" sino tantas representaciones del mundo como sujetos que lo perciben.

Reescribo:

Mi mundo me parece un lugar frío y despiadado.

Así como el ladrón sólo ve posibles víctimas y policías, así como el vendedor sólo ve posibles clientes o competidores; lo que vemos es siempre resignificado por lo que somos. El avaro cree que todos quieren su dinero porque él quiere el dinero de todos, el desconfiado cree que todos quieren engañarlo porque -en el fondo- él quiere engañar a todos.

Reescribo:

Soy un tipo frío y despiadado.

En circunstancias normales, la gente fría y despiadada puede serlo por dos motivos: es psicótica o perversa (yo no lo soy) o está asustada y teme que al mostrar candor y confianza los demás la lastimen. Hace falta grandeza o inconsciencia para mirar al mundo de frente y mostrarse tal como uno es.

Reescribo:

Soy un cobarde.



(pero no se lo digan a nadie!)

viernes, 12 de noviembre de 2010

Buda en mi LCD

Hace unos días me tomé un par de horas para tratar de explicarle (qué jactancioso!) a un adolescente mi teoría sobre el consumo y la felicidad. De más está decir que no entendió nada y me gustaría decir que fue su culpa, pero sospecho que la culpa fue mía.

Les explico por qué: (sigo jactancioso!)

Intenté contarle cómo funciona la industria, y cómo el mercado se mantiene mediante la generación de nuevas necesidades, para conseguir que las ventas no caigan. Esto significa que el pituto que hoy compraste y te parece fantástico, en un período razonable deberá parecerte una cagada para que salgas a comprar otro pituto (esta vez con gps o abs o ogt) y el mundo pueda seguir funcionando.

Si te dejaran ser feliz con el primer pituto que compraste, la sociedad colapsaría.

El pibe corre hace tres años atrás del último celular. Cuando lo tiene (y sus amigos no) se siente un winner. Dos meses más tarde se siente uno más. Dos meses después es un perejil y se desespera por comprarse -otra vez- el último celular.

¿Se entiende? Uno de los trabajos de la empresa es decirte (hoy) que ese modelo es fantástico. Su otro trabajo es convencerte (mañana) de que ese modelo es una garcha, para generarte insatisfacción y meterte la mano en el bolsillo, o en este caso el bolsillo de los padres.

Ahora bien: lo que a nivel global hace que el sol salga cada mañana, a nivel individual es una fuente de frustración permanente.


¿En qué falló mi explicación?

Muy simple.

Nadie puede explicar donde NO ESTA la felicidad, sin explicarte a continuación donde SI ESTA la felicidad.

Ahí naufragué.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Saquen una hoja

Tema 1:

Desde hace unos días estoy tratando de decidir si estoy triste o deprimido.

En un primer momento me noté más desganado que de costumbre, me asomé a mis sentimientos y pensé: "estoy deprimido".

Eso no me gustó. La tristeza me parece más noble que la depresión, así que lo razoné un poco más y cambié mi veredicto por "estoy triste". Básicamente me parece que la componente de enojo de la depresión va para atrás (si estas enojado, en vez de deprimirte anda y cagala a palos!).

Anoche, me sorprendí enojado otra vez. No me equivoco: estaba claramente enojado. ¿Entonces estoy deprimido? ¿Acaso uno no puede manifestar nobleza ni siquiera cuando sufre?

Tema 2:

Indefectiblemente uno es definido por el medio.
Lo lamento, pero es así y voy a demostrarlo:

En un planeta lleno de Maradonas, Diego sería un petiso medio gordito.
En un mundo de gente pacífica y espiritual, Gandhi sería un peladito más.
En un mundo de gente superinteligente, Einstein sería un viejito con el pelo desordenado.
En un mundo de gente iluminada, Buda sería un gordo disfrazado de naranja.
Lo mismo opera con iconos negativos.

Repito: uno es lo que es en relación con los demás.

Uno no es fuerte, lindo, simpático, rico, inteligente ni bueno. Uno no es merecedor de ningún adjetivo (ni bueno ni malo), si no es en relación a los demás.

Lo mismo sucede con nuestra percepción de los objetos: un auto que era sinónimo de lujo hace cuarenta años hoy sería considerado una bazofia. El auto es el mismo, lo que cambio es el marco de referencia.

Vamos a una historia:
Un tipo vive durante cinco años en una casucha de madera llena de goteras, pasando hambre y frío, en la más completa soledad.
¿Que sensación nos genera esta historia? Evidentemente la de un pobre tipo lleno de privaciones.

Ahora bien, ¿qué tal si le damos un contexto a la historia?:
Digamos que transcurre durante la segunda guerra mundial, el tipo vive en los alrededores de un campo de exterminio. Durante esos cinco años, toda la gente que él conoce es exterminada en medio de enormes sufrimientos.
¿Qué podemos decir ahora del pobre tipo? ¿Que tal vez no era tan desafortunado?

Es imposible tratar de resumir todo lo que esto implica con un simple "todo es relativo".


martes, 9 de noviembre de 2010

Hoy lluvia

A veces uno se siente espectador de sí mismo, de sus sentimientos y estados de ánimo.

Digo "desde hace algunos días estoy triste" como si dijera "hace tres días que llueve".

Igual, los panaderos siguen haciendo pan y los colectivos no alteraron su horario ni su recorrido.


lunes, 8 de noviembre de 2010

domingo, 7 de noviembre de 2010

Pandora?


Un recuerdo de mis épocas de tallador. Esta está en una mesita junto al teléfono.
Qué guardo ahí?

Misterio.

Que para eso son las cajitas!

sábado, 6 de noviembre de 2010

jueves, 4 de noviembre de 2010

Ni Poe ni Lovecraft...

Ayer, el calor y la lluvia no me dejaban dormir y me quedé sentado sólo hasta casi la madrugada en una silla de la cocina, en completa obscuridad.

A eso de las cuatro, me toco presenciar una escena que cambiará mi mundo para siempre. No hay forma de preparar al lector para la verdad que está a punto de conocer, así que me limitaré a narrar los hechos lo más escuetamente posible.

Yo había entrado en un estado de semi ensoñación, cuando de repente me percaté de que la puerta de la heladera estaba abierta de par en par. Su débil luz me mostró el perfil de dos frutas -una banana y una manzana- que, desde la penumbra, contemplaban el interior de la heladera.

Aún no había terminado de interpretar la escena que se desarrollaba frente a mis ojos cuando, para mi estupor, se desarrolló el siguiente diálogo:

- "Aún no puedo creerlo. ¿Qué monstruo haría algo así?", exclamó con apenas un hilo de voz la banana
- "Hay que estar muy enfermo para hacer ESTO!", contestó la manzana
- "Si existe un Dios, se lo hará pagar!"

El terror me tenía atenazado a mi silla y sólo recuerdo que trataba de respirar sin hacer el menor ruido para no ser descubierto. Presa del pánico más atroz, y consciente de estar presenciando una escena prohibida, cerré los ojos un momento. Cuando los volví a abrir, la heladera estaba cerrada y todas las frutas descansaban, como siempre, en la frutera.

Me quedé inmóvil en la misma posición hasta el alba. Durante esas horas, que me parecieron interminables, me repetí cientos de veces: "nunca más hago una ensalada de frutas!"

martes, 2 de noviembre de 2010

Aunque usted no lo crea

Se habría descubierto un estudio anatómico de Leonardo da Vinci que se creía perdido. El invaluable trabajo, que habría permanecido perdido durante más de quinientos años, ya está suscitando controversia entre los expertos, algunos de los cuales dudan de su autenticidad.



Mientras tanto, varios museos y coleccionistas privados han comentado su interés por la obra y se anticipa una puja millonaria.


AvergonzARTE



Haz tu karma y échate a dormir

Detrás de la idea de "Karma" y reencarnación, según pienso, se esconde el crudo reconocimiento de que una vida dura demasiado poco como para poder desprenderse de todas nuestras pendejadas.