La palabra recuperar se me antoja llena de peligros.
Es una de esas palabras que encierra preconceptos, aunque esto es común a casi todas las palabras.
Recuperar presupone que lo recuperado es igual a lo perdido. Presupone que algo se puede tener, y que algo se puede perder.
La idea de recuperar algo nos invita a pensar que el tiempo puede volver atrás, que las cosas pueden volver a un estado anterior. O a lo sumo nos invita a pensar que determinados cambios, inevitables, resultan tan irrelevantes como para suponer que, obviándolos, la situación recuperada es similar a la situación perdida.
Acordamos que la rosa mustia de hoy es la misma que ayer, inmaculada, perfumaba la misma habitación que hoy tiñe de melancolía. Incluso podríamos acordar que la rosa nueva con la que reemplazamos a la de ayer es, en cierto sentido, la misma rosa.
Pero nosotros no somos los mismos de ayer.
En mi caso esto es fantástico. Porque ayer yo era un pelotudo!
Ve? siempre se puede rescatar algo bueno. Y una rosa, inmaculada o ya marchita, siempre sera una rosa. Nada malo puede ocurrir si hay rosas en nuestra vida.
ResponderEliminarBesos.
Hay que progresar, el que no se acomoda a los nuevos tiempos se queda atrás...
ResponderEliminarSaludos
J.
Caro: haberlo sabido! Ya mismo salgo a comprar 50 docenas!
ResponderEliminarJosé: "progreso" es otra palabra sospechosa, igual que "acomodar". Y "nuevos tiempos" también me genera dudas, igual que "quedarse atrás".
Así que, eliminando lo que me genera dudas, tu comentario quedaría: "Hay que, el que no se a los se..." y como verás, no tiene mucho sentido. Deberás esforzarte más! (¿O tal vez seré yo el que deba esforzarse más?)
Dos besos
Todas las palabras son sospechosas de algún crimen o asociación ilícita...
ResponderEliminarSaludos
J.
José: lo que decis no podía ser más cierto. (Aunque no se me ocurre qué crimen podría imputarle a la palabra "peluche")
ResponderEliminarSaludos