Te cuento un poquito, imaginate el resto.
Jane Austen fue una escritora británica, perteneciente a la burguesía rural, cuya obra refleja, sobre todo, la problemática de las mujeres en esa sociedad. El matrimonio, por supuesto, ocupa un lugar central en sus obras.
Entre sus novelas hay una, Orgullo y Prejuicio, que me gusta particularmente, incluso desde el título ("Pride and Prejudice" en el original). Fue llevada varias veces a la pantalla, yo vi un par y me parecieron realmente bien logradas.
Luego de una serie de primorosos desencuentros, los dos protagonistas principales, terminan por encontrarse. Para ello, sufren los deliciosos malos entendidos producto, cómo no, del orgullo y del prejuicio; no solo de los protagonistas sino de una sociedad tan rígida como la de esa época.
Todo esto con un estilo literario impecable y ameno.
Ahora bien...
Todo lo bueno es mejorable, y al final siempre aparece alguien con la suficiente vocación.
Seth Grahame-Smith, luego de tantos años de disfrutar la historia como había salido de la pluma de Jane Austen, entendió qué hacía falta para mejorar lo aparentemente inmejorable. Y ahí nació... ORGULLO Y PREJUICIO Y ZOMBIS.
Esta nueva joya literaria fue, a su vez llevada a la pantalla, y al igual que su predecesora no perdió nada en el proceso.
Un reparto muy acertado, una ambientación cuidada, un ritmo que casi sin excepción respeta la "respiración" de la obra original...
Hay cosas que solo el tiempo ubica en su justo lugar. Así, sólo el tiempo dirá si en este caso la hija supera a la madre, mientras tanto, al menos podemos estar seguros que, como mínimo, está a su nivel.
Para despejar cualquier duda: no soy irónico. Un buen plan para un domingo lluvioso: ver la original, ir al baño, comer algo, estirar las piernas y ver la versión mejorada a puro zombi.
Que las disfruten!